ACTO PRIMERO

Al levantarse el telón aparecen VENTURITA y PACA. La primera en bata de mañana: sentada en un sillón, junto a una mesa en donde hay un nécessaire de señora. La segunda está arreglándola el peinado en forma masculina.

ESCENA I
VENTURA. PACA
VENTURA ¡Date prisa! ¡Qué torpeza,
Jesús! Al paso que vas
no sé cuando acabarás
de arreglarme la cabeza!
¿Pues tanto tiene que hacer?
PACA Señorita, no me amaño...
¡Y ya ve usted! no es extraño,
pues si fuera de mujer
sabe usted que tengo tino
pero en esto soy perdida
porque yo no he hecho en mi vida
un peinado masculino.
VENTURA Bien, mujer; tendré paciencia.
PACA Aquí me estoy ingeniando...
deje usted, ya iré ganando
cada día en experiencia.
De doncella de labor,
ya que usted el sexo muda
me convertiré en ayuda
de cámara del señor.
VENTURA Y antes que tú los motivos
llegaras de ello a saber
te admirarías de ver
tan raros preparativos.
PACA ¡Ya se ve! A primera vista
de veras me sorprendió
cuando vi que usted trocó
por el sastre la modista
y al principio lo dudé,
mas al ver que el equipaje
de aquel masculino traje
era todo para usted...
-¡Jesús! -me dije admirada
viéndolo ya tan de bulto-,
¡si tendría el sexo oculto
sin haberme dicho nada!
VENTURA ¡Anda lista!
PACA ¡Sí! Después
de aquella transformación
me dijo usted la razón
y ahora sé por lo que es.
No ignoro ya que se trata
de la pensión de un hermano
y de un tío mejicano
que es hombre de mucha plata:
Que murió el niño en Madrid
y la señora trocó
papeles... ¡y qué sé yo!
Hizo una trampa, un ardid.
Y que ahora viniendo él
usted tiene que ocultar
su sexo para evitar
que se descubra el pastel.
¿No es eso?